La fragilidad, un declive fisiológico progresivo en múltiples sistemas corporales, es un estado clínico en el que hay un aumento de la vulnerabilidad de un individuo a desarrollar dependencia o incluso muerte cuando está expuesto a un factor de estrés. La fragilidad puede ocurrir como resultado de una serie de enfermedades y condiciones de salud. Este síndrome puede ser retrasado si se identifica y se trata pronto. La prevalencia de fragilidad varía mucho entre países, pero se la identifica como un síndrome geriátrico específico de las personas mayores, y aumenta con la edad: el 20% de las personas de 80 y más años pueden tener este síndrome, incluso dejando aparte las que tienen problemas de salud crónicos y agudos.
La Asociación Internacional de Gerontología y Geriatría (International Association of Gerontology and Geriatrics, IAGG, fundada en 1950) puso en marcha en 2011 una red de investigación (Global Aging Research Network) con el objetivo de promover estudios sobre salud y envejecimiento para mejorar la calidad de vida y el bienestar de las personas mayores en todo el mundo.
El Libro Blanco tiene como objetivos promover intervenciones preventivas contra
discapacidad y proporcionar información sobre cómo implementar adecuadamente la cuestión de la fragilidad en la práctica clínica diaria.
White Book on Frailty (versión PDF, EN)